jueves, 1 de octubre de 2015

28 razones para dar gracias...

      Hoy es mi cumpleaños N° 28 y buscando una forma distinta de celebrarlo, pensé en hacer esta lista de 28 bendiciones que Dios me regaló desde el 1 de octubre 2014 hasta el día de hoy:

1-      Comencé  a estudiar Psicología, la carrera de mis sueños!
2-      Disfruté fin de año 2014 con mi familia en la playa.
3-      Culminé mi proyecto de 365 fotos durante todo el  año 2014.
4-      Tuvimos un concierto navideño precioso en la academia.
5-      Realizamos la primera noche de talentos en la iglesia y estuvo genial!
6-      La obra de teatro de mimos que realizamos con los niños de la iglesia quedó bellísima!
7-      Inicié mis estudios de Francés (otro sueño que estaba pendiente)
8-      Compartí varios estudios con las damas de la Iglesia de Cristo en San Cristobal. Fue una experiencia maravillosa!
9-      Hice nuevos y mejores amigos.
10-   Comencé el proyecto de leer toda la Biblia en un año durante el 2015 (y lo continúo!)
11-   Celebramos el 20 aniversario de la Academia de música.
12-   El curso de Creatividad Musical 2015 fue todo un éxito.
13-   Tuvimos la mejor celebración del día del niño que hemos tenido en la iglesia!
14-   Culminamos el estudio del material de Una Vida con Propósito con mis alumnos de la Escuela Dominical.
15-   Tuve el honor de impartir tres clases a las damas de la iglesia de Punto Fijo durante este año.
16-   Disfruté la convención occidental de damas en Mérida.
17-   Aprendí a amar verdaderamente a la tierra que me ha acogido durante estos últimos 20 años de mi vida: PUNTO FIJO
18-   Incursioné en el mundo del Crossfit y lo amooo!
19-   Por fin logré pesar menos de 60 kilos! (Para mi 60kg es el equilibrio. Mas de eso es obesidad y menos de eso es lujo jajajaja)
20-   Aprendí que amar se traduce en tolerar.
21-   Mejoré  en la administración del dinero.
22-   Aprendí a hacer galletas de chocolate.
23-   Adopté un estilo de alimentación más saludable.
24-   Aprendí a ver a los que me rodean como espejos que reflejan atributos de mi misma.
25-   Se consolidó la unión de mi familia.
26-   Me enamoré del yogurt y se ha convertido en mi aliado en el mantenimiento de mi peso.
27-   Leí muchos libros de psicología y ahora puedo entenderme mejor a mi misma y a los que me rodean.

28-   A pesar de la crisis por la que pasa Venezuela, Dios ha sido bueno y ha suplido todas mis necesidades.


¡Hoy celebro la vida!

@Lilimusical

lunes, 7 de septiembre de 2015

El arte de NO amargarse la vida PARTE 2

Continuando con el tema del artículo anterior (Leer Parte 1 aqui), estos son los otros 3 principios que nos ayudarán a vivir sin amargarnos (tantooo!):


4. ABANDONAR EL MIEDO A DEJAR DE PREOCUPARNOS:
Por favor vuelve a leer el principio. ¿Lo entendiste? Te lo traduzco: Abandonar el miedo a vivir en paz. ¿Qué sería de tu vida si no tuvieras que preocuparte por nada; ni por la comida del día, ni por tus hijos, ni por ningún aspecto de tu trabajo…? Muchos llegamos a la conclusión de que sin preocupaciones tendríamos una vida completamente aburrida. Porque ya estamos acostumbrados a que esos “mini-infartos” diarios le den sentido a nuestra vida. Por ejemplo: ¿Los niños comieron?, ¿Saldrían bien en el examen de hoy?, ¿Me irán a pagar la quincena hoy?, ¿Qué vamos a cenar?, ¿Dónde estará mi marido?, ¿Podré pagar mis deudas?...la lista de preocupaciones es larga e infinita. Lo peor del caso, es que la gran mayoría de las veces nos preocupamos por cosas que ni remotamente van a suceder. ¡Qué absurdo!

Vale la pena recordar estas sabias palabras:
“Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.” Salmo 23: 1-3

Si dejáramos de tener miedo a dejar de preocuparnos y decidiéramos confiar en que Dios no nos desamparará nunca…viviríamos en completa paz.

5. CONVÉNCETE DE LAS CREENCIAS RACIONALES:
Detrás de cualquier malestar emocional exagerado hay un pensamiento terribilizador. Son esas frases que empiezan asi: "Si tuviese..." "Si pudiera..."  Por ejemplo: “Si jamás tuviese pareja, mi vida sería terrible” La creencia irracional también se puede expresar en forma de necesidad: “Necesito pareja para ser feliz”.
Hay que insistir en que se trata de “convencerse” de las creencias racionales; no basta con repetirlas como un loro. La convicción en lo que no se ve, es necesaria. Miles de promesas nos hace Dios en Su palabra, solo es cuestión de creerle a El y en que las cumplirá.

Creencia irracional: ¡Nunca podré tener todo lo que necesito!
Creencia racional: Jehová es mi pastor, nada me faltará.

Estas son algunas creencias racionales que puedes adoptar de ahora en adelante:
-Todas nuestras necesidades serán abastecidas. Filipenses 4:19, "Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús".
-Ninguna cosa buena será retenida. Salmo 84:11, "Porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad".
-Tendremos toda la sabiduría que necesitemos. Santiago 1:5, "Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada".
-Tendremos paz. Isaías 26:3, "Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, porque en ti ha confiado".
-Podremos escapar de la tentación. 1 Corintios 10:13, "No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar".

6. REALIZAR VISUALIZACIONES RACIONALES
Te invito a hacer el siguiente ejercicio: visualízate en situaciones de posibilidad de neurosis, pero sintiéndote bien. No hablo de sentirte feliz, sino bien, estable, en paz. Por ejemplo, siendo menospreciado por alguien y bien; siendo despedido y bien; estando solo y bien…
Una persona muy sana y fuerte no necesita cosas materiales ni inmateriales: ni pareja ni la aprobación ajena. Es signo de gran pobreza que alguien necesite muchas cosas, porque de ese modo demuestra que carece de Dios.

Por último, me gustaría que pensaras en lo más terrible de todas las cosas…LA MUERTE.
La muerte lo relativiza todo, como dicen. Pensar en la propia muerte es uno de los mejores mecanismos para madurar y tranquilizarse, para ganar fuerza emocional. La ficción de eternidad en la vivimos, esto es, vivir como si fuésemos a estar aquí para siempre, nos vuelve locos. El hecho de la muerte hace que no haya nada demasiado importante y esto es un alivio, nos permite vivir con ligereza, que es la única forma de afrontar esta vida.

Si te dijeran que la próxima semana vas a morir, ¿Lo que te preocupa hoy, te seguirá preocupando con la misma intensidad?


Nosotros mismos nos separamos de Dios, dejamos de creer en sus promesas y adoptamos creencias irracionales. Recordemos Romanos 8 a través de este himno:


Apliquemos estos 6 principios, vale la pena vivir sin amargarse la vida.

@Lilimusical

domingo, 6 de septiembre de 2015

El arte de NO amargarse la vida PARTE 1

¿Has escuchado el dicho: “todo lo bueno llega junto y todo lo malo llega junto”? A veces es cierto. Cuando estamos de mal humor TODO se vuelve un desastre a nuestro alrededor. Parece que el mundo está en contra nuestra y nos sale todo al revés. Pero lo contrario también es cierto, en esos días que estamos animados y con una buena actitud, parece que estuviéramos de suerte y todo fluye a nuestro favor. Este tipo de situaciones se resumen en un pasaje: “Todos los días del afligido son difíciles; más el de corazón contento tiene un banquete continuo” Prov. 15:15
La pregunta (dirigida a los cristianos) sería: Si ya el Espíritu Santo habita en ti, ¿Por qué tu corazón no está contento siempre? En otras palabras… ¿Qué hace que te amargues la vida constantemente?



A continuación les compartiré 6 principios para dominar el arte de NO amargarse la vida:

1.       DOMINAR LA FUERZA EMOCIONAL:
“En vez de lo bueno que quiero hacer, hago lo malo que no quiero hacer” nos dice el apóstol Pablo en Romanos 7:19. Es que como humanos luchamos con dos fuerzas: la fuerza lógica o racional y la fuerza emocional. Una cosa es lo que yo sé que DEBO hacer y otra muy diferente es QUERER o sentir las ganas de verdaderamente hacer eso. Las emociones secuestran nuestra lógica y nos hacen actuar diferente. Para vivir una vida tranquila no es necesario dejar de tener emociones negativas, porque eso es completamente ilógico. Somos humanos y nacimos con un set de emociones variadas que no podemos obviar, inclusive las negativas (furia, rabia, temor). La meta sería no permitirnos tener emociones negativas exageradas; o sea, no irnos al extremo de la situación. Es normal enfadarse porque nos chocaron el carro, pero no vale la pena amargarse todo el mes sintiendo una rabia incontenible debido a ese hecho.

En este punto es necesario aclarar algo, generalmente creemos que los HECHOS EXTERNOS son los responsables de desencadenar las EMOCIONES. Eso es falso. Nuestro esquema mental es el siguiente: 
Hecho externo àpensamiento àEfecto emocional
No se trata de lo que nos pasa sino de lo que PENSAMOS sobre aquello que nos pasa. Para mi como docente, es normal ver a un niño vomitar. ¿Qué pienso yo? Seguro que le cayó mal el almuerzo, ahora se la pasa. ¿Qué puede pensar alguien que no se relacione con niños frecuentemente? ¡Este niño está enfermo, hay que llevarlo al médico urgentemente! Dos reacciones distintas ante un mismo hecho debido a dos formas distintas de pensamiento. Es por eso que a no todos nos "cae mal" la misma persona, o al menos no por las mismas razones. 

Si logro regular mis pensamientos sobre los hechos que me rodean, podré disminuir los efectos graves emocionales.

2.       DESCUBRIR LAS CREENCIAS IRRACIONALES
Detrás de cada malestar emocional, hay un pensamiento catastrófico. Estas creencias irracionales se caracterizan por:
  • Ser falsas (por exageradas)
  • Ser inútiles (no ayudan a resolver problemas)
  • Producir malestar emocional

Estas son las creencias irracionales básicas que sostenemos los seres humanos:
  • ¡Debo! Hacerlo todo bien o muy bien
  • La gente ¡me debería! Tratar siempre bien, con justicia y consideración
  • Las cosas ¡me deben! Ser favorables.

Sin embargo, las creencias racionales correspondientes serían del estilo:
  • Me gustaría hacerlo todo bien, pero no lo necesito para disfrutar del día.
  • Sería genial que todo el mundo me tratase bien, pero puedo vivir sin ello.
  • ¡Cómo me gustaría que las cosas me fuesen favorables! Pero no siempre va a ser así y lo acepto. Aun así, todavía puedo ser feliz.

Las creencias irracionales nos llevan a ver todo desde el extremo de lo terrible. Cuando decimos que determinado evento es “terrible” (o sería “terrible” si sucediese) queremos decir que: No puedo ser feliz, No debería haber sucedido, No lo puedo soportar.

Es una creencia irracional el hecho de que creas que eso que te está pasando es una completa catástrofe para tu vida. Eso indicaría que no eres de los que cree en lo que dice Romanos 8:28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.”

3.       CURARTE DE LA TERRIBILITIS
Las personas más vulnerables a nivel emocional tienden a evaluar todo lo que les sucede (o podría sucederles) en el peor extremo, “terrible”. ¡La terribilitis es la madre de todos los trastornos emocionales! Una persona madura emocionalmente es aquella que no exige, sino que prefiere. Cuando somos vulnerables a nivel emocional, estamos llenos de exigencias. Le exijo a mi hijos que estudien la carrera que yo quiero, le exijo a mi esposa que me sirva como yo quiero, le exijo a mi país que me dé todo lo que yo necesito, etc. Es distinto decir: “¡Te exijo que me trates amablemente!” a decir “Preferiría que me trataras amablemente, pero si no lo haces, aun así seguiré siendo feliz porque mi felicidad está en mis manos y no en las tuyas”. La felicidad implica disfrutar de los deseos sin apegarse a ellos, sabiendo que son meras formas de divertirse, pero en ningún caso, necesidades reales. Tener necesidades inventadas conlleva a otro problema adicional y es la generación automática de insatisfacción.

La enfermedad que origina la ansiedad y la depresión, la “terribilitis”, también podría denominarse “necesititis”, la tendencia a creer que “necesito, necesito y necesito para ser feliz”. Alguien maduro es aquel que sabe que no necesita casi nada para ser feliz. Si los deseos no se cumplen, no pasa nada; no los necesitamos para sentirnos plenos, para disfrutar de nuestras otras posibilidades. Dios suple nuestras necesidades de acuerdo a Su voluntad. No nos olvidemos que no importa la tormenta que nos rodee, lo importante es estar con Jesús en la barca.


Los cristianos solo necesitamos una cosa para ser felices: CRISTO JESÚS. Todo lo demás es lujo. Así que, si ya Cristo vive en ti, ¿Por qué te amargas por las cosas que te suceden o dejan de suceder?



@Lilimusical

sábado, 21 de febrero de 2015

MIS 20 FORMAS DE SERVIR A DIOS “ILEGALMENTE”

1.       Lavar y acomodar las verduras en la nevera como a mi mamá le gusta.
2.       Agregar TODOS los números telefónicos de los alumnos de mi papá (y de sus padres!) a su lista de contactos para crear grupos de whatsapp.
3.       Limpiar la casa.
4.       Ayudar a más de 500 mujeres (y algunos hombres) a ver la soltería desde otro punto de vista a través de mi página www.facebook.com/mujerfelizmentesoltera
5.       Alegrarle el día a alguien con un mensaje inspirador e inesperado.
6.       Escuchar los proyectos de mi familia, sin juzgar.
7.       Tranquilizar a un niño que entre a mi clase llorando.
8.       Rallar el queso para las tradicionales arepas del desayuno.
9.       Recargarle saldo al teléfono de mi papá y mi mamá.
10.   Ayudar a mi mamá a hacer diapositivas en la computadora.
11.   Entrenar a mi papá en el gimnasio.
12.   Enseñarle a mis alumnos la posición correcta para agarrar el lápiz, decir “por favor” y “gracias”, unir punticos, hacer las figuras musicales y recordarles mil veces, que deben permanecer sentados.
13.   Acomodar la ropa recién lavada.
14.   Recibir a mi familia con el almuerzo servido en la mesa.
15.   Secarle y plancharle el cabello a mi mamá.
16.   Asesorar a mi hermano en sus proyectos.
17.   Inyectar a mi papá cuando tiene dolor lumbar.
18.   Ser la secretaria de mi papá.
19.   Contribuir con el financiamiento de los proyectos personales de mi familia.
20.   Hacerte ver a ti, una forma distinta de ver las cosas a través de mi blog!

Fuera de las cuatro paredes de eso que llamamos "iglesia", podemos hacer cosas que tienen el mismo valor de aquellas que ya estamos acostumbrados a hacer adentro. Cantar, orar y leer no son los únicos tres verbos que se relacionan con Dios.
Erróneamente hemos creído que el único trabajo ministerial válido, es aquel que se hace con nuestra familia espiritual. ¡Somos luz! Y nuestro trabajo es hacer brillar ese Espíritu que mora dentro de nosotros, todo y todos los día y en todos los lugares.
Si todo lo que hacemos, lo hacemos como para Dios, entonces es válido incluir todas nuestras labores domésticas, profesionales y familiares a esa lista. Ninguna es más importante que la otra. Todas le agradan a Dios.

Es ilógico ser luz únicamente en la iglesia. ¿Y afuera qué? ¿Se nos acaba la energía eléctrica, como para seguir alumbrando? Si no alumbramos tu y yo, ¿Entonces quién lo hará? Somos nosotros, los cristianos, los encargados de mostrar la conducta de un verdadero discípulo a través de nuestro testimonio diario.